- El caso de la madre mexicana María Teresa Meraz Cruz
- La mató su novio
- Un desacuerdo desató la tragedia
El asesinato de una madre mexicana a sangre fría estremece los corazones de la comunidad hispana en Carolina del Norte.
Luego de que por un desacuerdo doméstico su novio le dispara mortalmente.
María Teresa Meraz Cruz, de 52 años, llegó desde México hace muchos años con un firme propósito…sacar adelante a sus cinco hijos.
Diariamente se esforzaba; limpiando casas se había labrado su camino, costeaba sus gastos y sostenía a su familia.
María Teresa Meraz Cruz limpiaba casas
Ahora sus hijos recurren a una cuenta de recaudación de fondos para rendirle el homenaje póstumo que ella merece luego de su inesperada pérdida.
Así lo hizo saber su hija, Kayla Martínez Meraz, en una cuenta de Gofundme.
Meraz perdió su vida en la misma casa que compartía con sus hijos y su novio, Miguel Ángel Ventura.
Aunque no está claro qué originó la discusión con su pareja, su desenlace ha estremecido los cimientos de un hogar.
La mexicana sacaba adelante a sus hijos
Una de las hijas mayores de María Teresa fue quien llamó al 9-1-1 luego de escuchar dos detonaciones en la habitación de su madre.
Salió fuera de su casa hasta que llegaron los agentes.
Eran las 10:00 de la noche del pasado 24 de enero cuando los oficiales se acercaron a la joven para que les indicara dónde estaban las víctimas y qué había pasado dentro de la casa, en la calle McGee Road, en la localidad Benson.
“La madre de la chica y el novio de la madre estaban dentro de la residencia. La mujer afirmó que los escuchó tener un desacuerdo e inmediatamente escuchó dos disparos”, indicó la Oficina del Alguacil del condado Johnston.
Su propio novio le arrebata la vida
Dentro de la vivienda, los agentes encontraron a María Teresa y a Miguel Ángel Ventura, con heridas de bala.
Ella todavía respiraba, mientras él fue declarado muerto en el lugar, como consecuencia de una herida de bala autoinfligida, escribieron los oficiales en su informe preliminar.
Los paramédicos trasladaron de emergencia a Meraz-Cruz hasta WakeMed en Raleigh.
Los médicos la declararon muerta minutos después de su ingreso, producto de los estragos que hizo el proyectil en su cuerpo.
Abren cuenta de recaudación de fondos
«Mi madre María nos fue arrebatada trágicamente demasiado pronto (…) Estamos devastados y desconsolados por su pérdida», escribió Kayla Martínez para explicar la situación actual de su familia.
Los allegados y amigos desconocían desde cuándo ella era víctima de violencia intrafamiliar.
Solo alguien se atrevió a comentarle a los detectives que una vez la escuchó mencionar alguna amenaza.
Pero ella nunca recurrió a los órganos competentes para denunciar.
Caso de asesinato-suicidio
A la mexicana la recuerdan como «una gran madre, que siempre puso a sus hijos en primer lugar y una amiga increíble con la que siempre se podía contar», dijo su hija.
Aunque su hogar está deshecho, sus familiares se esfuerzan por guardarla en su mente como la mujer amorosa, trabajadora y alegre que siempre fue.
Por el caso, la oficina del Sheriff indicó que no hay sospechosos ni personas de interés en esta investigación.
Todas las entrevistas y evidencias apuntan a que se trató de un caso de asesinato-suicidio, donde el agresor también perdió la vida.
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